Why art cannot be taught
En ese libro habla de la dificultad de hacer una crítica de arte efectiva, y por lo tanto de por qué un maestro no puede valorar la obra de un alumno de forma que le ayude a ir, digamos, del paso uno al diez, o cincuenta, en su aprendizaje del arte.
Las once razones que da son:
2 - Las críticas son demasiado cortas.
3 - Hay que distinguir entre los que dan su opinión después de haberla pensado y los que forman su opinión mientras hablan.
4 - A menudo el maestro que critica una obra hace sus propias obras y es probable que de entrada no le guste, porque de ser así él mismo habría hecho algo en esa línea.
5 - Los críticos de arte tienden a hacer declaraciones muy peculiares.
6 - Las críticas son muy emocionales.
7 - Una crítica de arte tiene la dificultad de cualquier traducción, agravadas en este caso por tener que adaptar un lenguaje verbal a uno visual.
8 - No hay hoy acuerdo en cuanto a qué importancia hay que dar a la técnica.
9 - No hay reglas sobre si la crítica debe contener un juicio o ser sólo descriptiva.
10 - La presencia del artista influye en la crítica.
11 - La mayoría de obras de arte no son novedosas, y es muy difícil ensalzar una obra de arte "corriente".
Algunas de esas razones son cuando menos curiosas, como la primera. Supongo que se refiere a que si la propia definición de arte es objeto de reflexiones interminables, más indefinida aún será su crítica, su valoración. No pretendo aquí traducir ni resumir, y menos interpretar, la obra de James Elkins, sólo he pensado que algunos se verán identificados con alguna de esas dificultades, cuando les han pedido su opinión sobre una obra o cuando la han recibido de otros.
Precisamente porque estoy de acuerdo en que es muy difícil enseñar "arte", he escrito diez criterios que puedan ayudar a cada uno a juzgar sus propias obras, sabiendo que, por complejos que sean, al menos son sólo diez. De esa forma uno podría criticar sus cuadros dando una puntuación a cada uno de los diez aspectos, de manera que el total sería una aproximación razonable de lo logrado con esa obra, con respecto a otras.
Para hacer esa auto-evaluación de la forma más objetiva posible uno iría considerando cada uno de los diez aspectos de forma independiente, asignando una puntuación de 1 a 10 (el 0 no existe, el mero hecho de intentarlo ya merece un punto :-). Teniendo en cuenta que hay que reservar espacio para las obras maestras, el sobresaliente, 9/10 sería para aquellas obras que realmente nos han salido redondas en el aspecto considerado (o que pensamos que el autor ha ejecutado de forma excelente, si estamos evaluando la obra de otro). Notable 7/8 sería para las obras que, teniendo en cuenta sólo el punto que estamos considerando, podrían colgar dignamente en una galería. Aprobado 5/6 son las obras que cumplen con el mínimo aceptable. 3/4 necesitan mejorar y 1/2 no pasan de un nivel básico.
1 - Dibujo - Nos fijamos sólo en la inclinación de las líneas y contornos. ¿Es convincente?
2 - Forma - Evaluamos si los volúmenes están correctamente representados.
3 - Color - Si un objeto está parcialmente en luz y parcialmente en sombra, ¿parece el mismo color?
4 - Valor - ¿Se ha usado el valor para representar la luz de manera coherente? La cantidad de luz. Su dirección. Su color. Su temperatura.
5 - Diseño - El reparto de áreas en la superficie del cuadro, ¿es atrayente? (Este es uno de los puntos más difíciles de valorar de forma objetiva. Conviene que al menos sea consecuente con la puntuación que hemos dado a otras obras).
6 - Ver - ¿Hay algo que es obvio que el autor ha tenido que ver y no ha corregido?
7 - Técnicas - ¿Se han utilizado las peculiaridades del medio utilizado en beneficio del resultado?
8 - Pincelada - ¿No se ven pinceladas inútiles?, ¿hay un uso efectivo de bordes nítidos y difusos?
9 - Concepto - ¿Da la impresión de que el autor tenía una intención determinada al realizar la obra?
10 - Estilo - ¿Tiene la obra similitudes con otras obras del autor?
Con todo ello tendremos una puntuación de 10 (espero que no) a 100. Al haber evaluado cada punto de forma separada es más difícil que nos hayamos basado únicamente en nuestro gusto subjetivo con relación a la obra. Podemos expresarlo con una nota de 1,0 a 10,0, suficiente para relacionar unas obras con otras.
Una última consideración. A veces uno de los aspectos no será aplicable. En ese caso puntuaremos sólo los que sí son relevantes y calcularemos la puntuación relativa a 10. Por ejemplo, si en una obra abstracta el dibujo y la forma (el volumen) no son relevantes, y obtenemos una puntuación de 6,2 sobre 8, diremos: 6,2 es a 8 como x es a 10, y daremos a la obra la puntuación resultante: 7,8.